Antroposofía y trimembración social

Antroposofía y trimembración social

 

Índice

 

La antroposofía, fundamento para el entendimiento de la trimembración social

Entender la trimembración social y los ideales sociales desde la constitución trimembrada humana

Conexión interior con los tres ideales sociales

Entender la necesidad de la trimembración social desde la trimembración de pensamiento, sentimiento y voluntad

Ámbitos de actuación saludables para el pensar, sentir y querer

Conceptos centrales de la ciencia social antroposófica. Impulsos para una sociedad sana

Valor humano, dignidad humana, amor al ser humano

Adquirir un conocimiento de la evolución de la humanidad

 

La antroposofía, fundamento para el entendimiento de la trimembración social

“En el fondo, cuando en la actualidad se habla a un público común de la trimembración del organismo social, se habla prácticamente a oídos sordos. Y además de esto, si se pretende lograr algún éxito, hay que estar de cierto modo incorporado en el movimiento, sobre todo desde el sentimiento y el corazón. No es necesario, ni mucho menos, estudiar los secretos del éxito adaptándose escrupulosamente a lo que quiere escuchar el público. Lo que es necesario es ser contemporáneo de la época actual y colocarse en la actualidad. Y miren ustedes, lo único capaz de introducir a las personas en el centro de los fenómenos de la época, y lo único que puede suscitar un interés realmente profundo en los fenómenos de la época, es la antroposofía. Por estas y otras razones, quien quiera hablar exitosamente sobre la trimembración, como mínimo debe estar íntimamente convencido de que es necesario para la comprensión de la trimembración el que también la antroposofía sea acercada al público. “

Rudolf Steiner, Antroposofía, trimembración social y arte discursivo, sexta conferencia, Dornach, 16 de octubre de 1921, Editorial El Liceo, 2016

 

Entender la trimembración social y los ideales sociales desde la constitución trimembrada humana

Rudolf Steiner concibe la trimembración social fundamentada en el conocimiento del ser humano. En lugar observar la realidad social para sacar conclusiones y proponer reformas, Steiner siguió un método que partió de la pregunta de cómo debe ser el organismo social para estar al servicio del ser humano.

La antropología antroposófica distingue la parte física, anímica y espiritual del ser humano. El ámbito cultural-espiritual de una sociedad tiene la función de educar al individuo y crear las condiciones para su desarrollo espiritual libre, entre otras en la esfera del arte, de la ciencia, de la convicción religiosa, de la salud y el pensamiento libre. El ámbito anímico es el del intercambio con los demás, las relaciones, la expresión de opiniones y la construcción de derechos con los que pueden vivir todos. Este ámbito, el ámbito jurídico-político, debe dar seguridad y garantizar la igualdad de participación para todos los ciudadanos. Y finalmente, la tarea de satisfacer las necesidades físicas del ser humano en condiciones dignas es la tarea de la organización económica, para la que Rudolf Steiner desarrolló el ideal de una economía fraternal en comunidades asociativas. 

¿Tiene sentido postular un nuevo orden social y la realización de los tres ideales sociales si se parte de una concepción que reduce la naturaleza del ser humano al aspecto físico material? La respuesta de Rudolf Steiner es la siguiente:

"Con la Revolución Francesa surgen tres de los más legítimos impulsos de la vida humana: los de la fraternidad, libertad e igualdad. Por otro lado, como caractericé en otra ocasión, esta triple unidad de fraternidad, libertad, igualdad que tiene su origen en la Revolución Francesa apareció de una forma contraria a la evolución de la humanidad. Si es justificado partir de que la humanidad está en un proceso de devenir, no se puede hablar de estas tres, la fraternidad, la libertad, la igualdad, sin hablar de alguna manera de los tres miembros de la naturaleza humana.   ...

No tiene sentido concebir el ser humano como unidad que resultó de una mezcla fortuita y luego hablar de fraternidad, libertad e igualdad. Antes hay que saber que el ser humano está constituido en cuerpo, alma y espíritu, y hay que saber que el ser humano sólo puede ser libre si quiere ser libre en su alma."

Sintomatología histórica, segunda conferencia, GA 185.

 

“Quien contempla al ser humano terrestre reducido a su vida como ser físico, entre el nacimiento y la muerte, no ve el ser humano integral, tiene una visión errónea del ser humano integral. Y si de ahí establece un ideal humano para el ser humano físico, este ideal no hace justicia al ser humano integral.”

Impulsos evolutivos interiores de la humanidad. Goethe y la crisis del siglo XIX, novena conferencia, GA 171.

 

“Sólo cuando se sabe que el ser humano está compuesto de cuerpo, alma y espíritu, y que de los tres ideales de finales del siglo XVIII, la fraternidad se refiere al cuerpo, la libertad al alma, la igualdad al Yo, entonces se habla en un sentido que corresponde al sentido interior del mundo espiritual.”

Impulsos evolutivos interiores de la humanidad. Goethe y la crisis del siglo XIX, novena conferencia, GA 171.

 

Conexión interior con los tres ideales sociales

La ciencia espiritual social siempre parte del conocimiento del ser humano. Las ideas de la trimembración social no son dogmáticas sino quieren ser evaluadas y entendidas mediante un acercamiento individual. Los tres grandes ideales sociales –libertad, igualdad y fraternidad-- son un reto y una oportunidad para no solo “entenderlos” sino también sentir e imaginarlos como realizables en la sociedad.

La trimembración social enseña por qué y cómo los ideales sociales tienen que ser realizados cada uno en su respectivo ámbito social: el ámbito cultural-espiritual, el ámbito jurídico-político y el ámbito económico.

Véase también en este glosario:

Ideales sociales

Ideales sociales -- Atenuación y desorientación

Ideales sociales – Cuerpo alma y espíritu

Ideales sociales -- Aproximación interior

 

Entender la necesidad de la trimembración social desde la trimembración de pensamiento, sentimiento y voluntad

En el actual estado de evolución, la humanidad moderna ha logrado  un estado de disociación de pensamiento, sentimiento y voluntad en el que la inteligencia abstracta y el pensamiento muerto ya no reciben la vida del sentimiento y de la voluntad, un estado en el que el Yo tiene que reinventarse desde sí mismo y volver a transformar el pensar, sentir y querer en una nueva unidad.

“Al observar al ser humano individual que cruza el umbral hacia el mundo suprasensible, podemos decir que este alma experimenta en sí la disociación de las vidas pensante, sintiente y volitiva. Y al observar la humanidad actual, que, al pasar por el quinto período postatlante, cruza el umbral detrás de los bastidores del devenir histórico, entonces hay que decir: La humanidad debe encontrar su vida pensante en un organismo espiritual libre; su vida sintiente, es decir, las relaciones de los sentimientos que se producen entre ser humano y ser humano, en el organismo jurídico-político independiente; la vida volitiva en el organismo económico. Mirando estas cosas de esta manera, se tendrá los fundamentos correctos y profundos para la necesidad del organismo social trimembrado.”

Rudolf Steiner, Impulsos del pasado y del futuro en el acontecer social. Los trasfondos espirituales de la cuestión social,  novena conferencia, 9 de abril de 1919, GA 190,

 

Véase también en este glosario:

Trimembración interior. Pensar, sentir y querer

 

Ámbitos de actuación saludables para el pensar, sentir y querer

La humanidad moderna dispone cada vez más de un Yo autónomo, y ya no es miembro de un conjunto social en el que tiene la seguridad de que los asuntos sociales son gestionados por sabios, sacerdotes e iniciados (véase en este glosario, “Ley sociológica fundamental”).

La libertad del ser humana, hace que las facultades anímicas se hagan autónomas en un sentido unilateral, rompiendo los lazos de la unidad que forman en el individuo.

“Lo que en el ser humano actúa en unión en el pensamiento, el sentimiento y la voluntad, asumirá un carácter de fragmentación en el futuro, y reivindicará su derecho en los más diversos campos. Estamos en el proceso en el que la humanidad está atravesando inconscientemente un umbral significativo, muy bien visible para los ojos del vidente. La humanidad está atravesando este cruce del umbral de tal manera que las áreas de pensamiento, sentimiento y voluntad se están disociando.

Esto significa para nosotros un cierto compromiso: el de configurar la vida exterior de tal manera que el ser humano pueda experimentar en él las nuevas condiciones de la vida interior. A medida que el pensamiento se vuelve más independiente en la vida de la humanidad, es necesario que preparemos un terreno en el que el pensamiento pueda desplegar su actividad de manera saludable, un terreno en el que el sentimiento pueda desplegar su actividad de manera autónoma, y un terreno en el que la voluntad pueda desplegar su actividad particular.

Lo que hasta ahora actuó de una manera caóticamente entrelazada en la vida pública, ahora, lo tenemos que configurar en tres ámbitos. Estos tres ámbitos de la vida pública son: la vida económica, la vida estatal o jurídica y la vida cultural o espiritual. Esta necesidad de la trimembración social está relacionada con el enigma de la evolución de la humanidad en esta época.

No hay que pensar que sea un invento arbitrario lo que se pretende hacer valer con la trimembración social. Esta fue concebida a partir del conocimiento más íntimo de la evolución de la humanidad, y a partir de las condiciones necesarias para que se cumpla el objetivo de tal evolución.

Rudolf Steiner, El aspecto interior del enigma social, sexta conferencia Berlín, 12 de septiembre de 1919, GA 193

 

Véase también en este glosario:

Trimembración interior. Pensar, sentir y querer

 

Conceptos centrales de la ciencia social antroposófica. Impulsos para una sociedad sana

“Quien quiera entender las ideas de la trimembración social tendrá que hacer la labor de seguir cómo los impulsos sanos para las vidas jurídica y económica solo pueden ser dados por una vida espiritual libre.  Tendrá que dejar que la vida le enseñe que un sistema de educación determinado por los sistemas jurídico y económico tiene que perder la fuerza necesaria para mantener vivo el organismo social. A partir de ahí alcanzará un entendimiento de una vida económica asociativa y de una vida jurídico-política realmente democrática.   ,..

Para señalar tal camino, hay que partir de las fuerzas sociales actuantes en nuestra época actual. El sistema escolar existente ha hecho que la tecnología moderna haya transformado la vida y que la ciencia moderna sea para muchos un elemento importante de su concepción de la vida.

Todo esto ha generado nuevos conceptos de la existencia humana digna, Y las dos fuerzas del presente mencionadas [la tecnología moderna y la ciencia moderna], que son unas fuerzas muy reales, también son el punto de partida para los que defienden la trimembración social. Sus ideas serán entendidas una vez lograda una sensación de lo que dichas fuerzas significan. Muchos cuentan con la tecnología pero no con la vida de quienes están condicionadas por la tecnología. Otros cuentan con el espíritu científico; lo quieren ver cultivado, y con derecho, en el sistema escolar. Pero no cuentan el sentimiento de la vida provocada por la ciencia. La trimembración social cuenta con todo lo que ellos no toman en cuenta.

El proletariado ha perdido la confianza porque siente cómo hay tantos que no tienen en cuenta su vida ni su alma. Solo habrá mejora cuando encuentre a través del corazón y del alma, el camino hacia las ideas sociales que cuentan con ambas fuerzas – ideas que no la ofrecerán las ideas de siempre porque quieren seguir un camino real, no utopías ebrias. “

Rudolf Steiner, Las fuerzas reales en la vida social del presente, en GA 24, Artículos sobre la tripartición del organismo social y la situación de la época

 

“El ser humano orienta su trabajo por las ideas que germinan en su alma. Si ha de trabajar en el contexto de la vida social, sólo sentirá que su existencia es digna si en esta vida social hay ideas que le hacen entender su trabajo a la luz de la dignidad humana.”

Rudolf Steiner, Artículos sobre la trimembración del organismo social y la situación de la época entre 1915 y 1921, septiembre 1920, GA 24: La sed de la época por ideas nuevas

 

“Se produce una condición nada saludable cuando el ser humano no puede encontrar ninguna relación con su trabajo, debido a que el proletariado moderno se ve arrancado del suelo del trabajo artesanal, donde el ser humano todavía estaba íntimamente ligado con su profesión y donde su oficio era la fuente de su honor y dignidad. Es una condición nada sana que hoy se vea enfrentado a la máquina e insertado en la fábrica. Pero quien conozca la vida espiritual en su verdadero fondo, sabe que tal condición nada saludable para la relación del ser humano con su trabajo solo se puede producir bajo condiciones que igualmente son nada saludables.

En una vida espiritual sana, libre e independiente de la vida política y económica, no hay nada que no repercute en la sociedad, nada que no sea inmediatamente interesante, y nada que, si solo se maneja de la manera adecuada, no conecte al ser humano con su trabajo porque él sabe: mi trabajo será una parte importante en la circulación del organismo social. No hay que considerar incuestionable que el ser humano tenga condiciones en las que se ve forzado a hacer trabajos nada interesantes. Todo lo contrario: hay que buscar la cualidad fundamental de la vida espiritual que únicamente puede explicar la relación del ser humano con su trabajo y provocar el interés en este trabajo en cualquier ámbito.”

Rudolf Steiner, La cuestión social, conferencia del 8 de marzo de 1919, GA 328

 

Valor humano, dignidad humana, amor al ser humano

¿Cómo podemos entender desde la antroposofía la condición anímico-espiritual del ser humano y su relación con los ámbitos sociales? La dignidad es un tema central del trabajo humano. La antroposofía señala que el mundo laboral, más allá de ser un factor económico, es del campo central en el que se realizad el derecho humano y la dignidad del ser humano.

En el ciclo “Antroposofía, sus raíces cognoscitivas y sus frutos para la vida”, Rudolf Steiner  habla de la antropología antroposófica y de cómo esta repercute en los ámbitos prácticos de la vida y en el entendimiento de las condiciones de los factores socio-económicos: de capital, trabajo y mercancía.

La ciencia espiritual antroposófico ofrece

“profundizar en la vida dinámica de capital, trabajo economía, etc.” y “entender lo que el ser humano vivencia en el orden social; cosa que no es de extrañar en absoluto, pues lo que el ser humano vivencia de esta manera surge, en última instancia, del mismo ser interior del ser humano”. Lo interior del ser humano es su naturaleza anímico-espiritual, o como mínimo, es dirigido por ella. Da ahí que, al investigar el orden social, uno siempre se encuentra con lo espiritual, pues no es de extrañar que sean necesarios métodos espirituales para entender las condiciones sociales.”

Rudolf Steiner, Antroposofía, sus raíces en el conocimiento y sus frutos para la vida, octava conferencia, GA 78

En otras palabras: la ciencia espiritual antroposófica investiga la condición humana en su relación con los tres ámbitos sociales y con sus factores centrales para la vida cotidiana y la vida económica: capital, trabajo y mercancía/precio.

A nivel anímico-espiritual, en una afirmación densa de contenido, Rudolf Steiner menciona el efecto que tiene el estudio y entendimiento del ser humano a través de la antroposofía sobre las tres cualidades anímicas, que a su vez tienen cualidades sociales y de conexión con los tres ámbitos sociales:


“Lo que se enciende en nosotros a través de los conocimientos suprasensibles de la ciencia espiritual antroposófica es el amor al ser humano, amor que nos enseña el valor del ser humano, valor que nos hace sentir la dignidad del ser humano. Entender el valor del ser humano, sentir la dignidad del ser humano, y querer actuar en el amor al ser humano, son los frutos más bellos de la vida que crecen en el ser humano a través de la experiencia de los resultados de la ciencia espiritual. Esta tiene un efecto sobre la voluntad humana, de tal forma que puede alcanzar lo que he descrito en mi “Filosofía de la Libertad” como intuiciones morales.”

Rudolf Steiner, Antroposofía, sus raíces en el conocimiento y sus frutos para la vida, séptima conferencia, GA 78

 

Véase también en este glosario:

La dignidad del ser humano

 

Adquirir un conocimiento de la evolución de la humanidad

Rudolf Steiner no fue un “reformador social”; sus ideas de la trimembración social exigían un cambio radical en el pensamiento. Las ideas de la trimembración social no son ideas privadas de un genio; no son un modelo entro muchos posibles. En su carácter general y esencial, son el resultado de la ciencia espiritual de Rudolf Steiner, aplicada en lo social.

Mientras la sociedad no sea trimembrada, no dejarán de producirse grandes crisis sociales. Los grandes crisis sociales mundiales nos pueden advertir de que la humanidad está buscando su camino evolutivo con errores y dolores necesarios. La antroposofía nos enseña entenderlos, y entender nuestra vida como una parte de los grandes sucesos en el mundo y en la humanidad.

Véase también en este glosario: “Alma consciente”, “Sociedad trimembrada  - origen y evolución”.

 

“No crean que la necesidad del organismo trimembrado sea justificable por las ideas aleatorias de cualquiera. Por el contrario, tal necesidad surge del conocimiento más íntimo de la evolución humana, y de lo que necesariamente tendrá que suceder para que, bajo el reconocimiento de su sentido, la meta de la evolución de la humanidad se haga realidad. Por eso tuvimos que pasar por esta terrible catástrofe de la guerra mundial de los últimos años, porque la dificultad consistía en reconocer una meta que es de naturaleza espiritual y porque nadie se ocupó de reconocer metas de este tipo.

Hay que hacer fuerzas para salir de este caos. El propio transcurso de la evolución de la humanidad dicta y exige que hagamos un esfuerzo para salir de este caos. Por eso creo que sólo aquellos podrán comprender la necesidad de una trimembración social que partan de convicciones interiores antroposóficos y del conocimiento de lo que realmente está sucediendo en el desarrollo de la humanidad.”

Rudolf Steiner, El aspecto interior del enigma social, sexta conferencia Berlín, 12 de septiembre de 1919, GA 193

 

Autor/traductor: Michael Kranawetvogl