Este-Oeste

La polaridad Este Oeste

 

Índice

La ampliación de las ciencias actuales por la Antroposofía, Zúrich, 14 de noviembre de 1917, GA 73.

La vida cultural-espiritual de la Europa Central: Mediadora entre Oriente y Occidente

El entendimiento de la polaridad Este-Oeste. Una oferta de la Antroposofía

Este y Oeste – Almas de los pueblos y hegemonía económica

Cómo Oriente percibe a Occidente

Rusia: Aversión contra el capitalismo; apertura hacia la vida espiritual

Occidente y Oriente. Salvajismo y barbarie

Más allá de Este y Oeste. La trimembración social como orden social internacional transfronterizo. La acción para la Alta Silesia en 1921

El Goetheanismo, fuerza central de equilibrio y paz

Ciencia económica goetheana, no capitalista: un pensamiento accesible al Oriente y Occidente

 

 

“La ciencia espiritual estudia detalladamente en qué realmente consisten los impulsos de la población de la Europa Central, de la población de la Europa del Oeste, de la Europa del Este. Alcanza ver cómo los distintos impulsos anímicos que surgen del organismo social son tan específicos y justificados como los que surgen del organismo físico. Aprende a reconocer que también la convivencia de los pueblos está relacionada con dichos impulsos. La ciencia espiritual encuentra en la humanidad oriental una estructura anímica bien diferente a la de la humanidad occidental y sabe cómo estas estructuras tienen que llegar a vivir y convivir en la vida europea.”

La ampliación de las ciencias actuales por la Antroposofía, Zúrich, 14 de noviembre de 1917, GA 73.

El pensamiento social trimembrado se caracteriza por el hecho de que descubre y estudia polaridades y el estado dinámico que se establece entre las mismas mediante el tercer miembro, un elemento central. En este sentido, Rudolf Steiner vio Europa Central en una función y misión sanadora entre fuerzas enfrentadas.

 

La vida cultural-espiritual de Europa Central: Mediadora entre Oriente y Occidente

La grieta entre la sabiduría oriental y la inteligencia occidental solo puede ser superada por la confianza en la cultura central-europea, que, aparte de la tecnología y progreso, también ha producido, por ejemplo, el Goetheanismo la ciencia espiritual.

“… El hombre occidental toma la espiritualidad del antiguo Oriente como un bien del alma que puede añadir a sus logros materiales como un suplemento. Sin embargo, el contenido espiritual mediante el cual el hombre occidental puede hacer que su ciencia, su tecnología, sus capacidades económicas sean realmente dignas del ser humano, debe provenir de las capacidades que él mismo puede desarrollar en su interior. "Ex Oriente lux" es el lema de muchos. Pero la luz que viene de fuera no se convierte en la percepción de la luz a menos que se reciba de una luz interior.

La política mundial sin alma debe convertirse en una política con alma.

Ciertamente, el desarrollo del alma es un asunto humano íntimo. […] El sentido comercial que el asiático percibe en el hombre europeo es rechazado en Oriente, en cambio, un alma que tiene contenido espiritual inspirará confianza.”

Rudolf Steiner, La cuestión mundial, en: Numero 2 de Das Goetheanum, semanario para Antroposofía y trimembración social, 28 de agosto de 1921.

 

El entendimiento de la polaridad Este-Oeste. Una oferta de la Antroposofía

“La ciencia espiritual quiere dar a la humanidad lo que necesita para que las ideas puedan volver a seguir el curso de los acontecimientos mundiales. Con tales pensamientos uno se expone ciertamente a la recriminación de que, si alguien quiere encontrar su camino en las dificultades del presente, que abarque a todos los pueblos y situaciones de la vida, solo debe preguntar a la gente del Goetheanum; ellos ya sabrán cómo se resuelven todas las cuestiones.  Quien realmente sabe vivir en el espíritu de la Antroposofía […] quisiera señalar de manera muy modesta lo que falta en el trabajo de la humanidad actual y lo que hay que buscar para que una fuerza espiritual que, no solo anime la cabeza sino a todo el ser humano, pueda servir a las grandes tareas que, al fin y al cabo, son percibidas por muchos como muy urgentes. […] También Occidente y Oriente solo llegarán a entenderse a partir de una espiritualidad viva y no sobre los cimientos sobre los que hoy se construye.”

Rudolf Steiner, la situación mundial, en: Numero 1 de Das Goetheanum, semanario para Antroposofía y trimembración social, 21 de agosto de 1921

 

Este y Oeste – Almas de los pueblos y hegemonía económica

“He ahí los impulsos [de distintas fuerzas que actúan en la historia] que hace falta conocer porque están enmascarados, transformados, metamorfoseados de las formas más variadas. Todo lo que se puede observar ahora será adecuadamente apreciado si se evalúa desde el punto de vista que acabo de comentar [el de las cualidades de las almas del pueblo de Inglaterra, Francia, Italia y Alemania]. Y en primer lugar hay que entender la importancia del hecho de que, en el intento de establecer la supremacía mundial de la población anglófona, de la que vengo hablando desde hace muchos años, actúa sustancialmente la formación del alma consciente, que es la propia de nuestra época. De  ahí tendría que empezar una sana evaluación de las circunstancias”.

Bases histórico-evolutivas para la formación de un juicio social, séptima conferencia, GA 185a, noviembre de 1918.

 

“Pero en el plan histórico mundial no solo ocurrirá lo que acabo de indicar; en lo que en principio solo es una gigantesca lucha económica, también se mezclará perturbadoramente otro elemento. La lucha económica surgirá dentro de la humanidad y será una lucha económica ferozmente llevada a cabo entre la una y la otra mitad de la Tierra. La lucha económica dentro de la humanidad se basa en el desarrollo de los sentidos y el sistema nervioso.  

Y en el quinto período post-Atlante, en la época del alma consciente, el mundo anglófono está organizado especialmente para el sistema nervioso sensorial, porque durante este período el sistema nervioso solo desarrolla pensamientos utilitarios materialistas, con la tendencia de transformar el mundo en una gran empresa comercial.

Pero en este mundo del sistema neurosensorial, el otro polo en la vida humana, el mundo de la sangre, ejerce otro efecto perturbador. Este mundo de la sangre lanzará olas que chocan con lo que la vida neurosensorial levanta como una lucha puramente económica. El mundo de la sangre que inicialmente está representado por los pueblos eslavos, las etnias de los checos, eslovenos, polacos, eslovacos etc., hasta que intervenga la otra ola, de sangre purificada espiritualizada del este de Europa, el elemento ruso-eslavo.

Por un lado, el plan para el Este y Europa Central es que sean transformados desde el Oeste en una gran área de consumo de la producción mundial de Occidente; desde el otro lado irradiará la rebelión del proletariado consumidor contra Occidente, pero sobre todo también la ola inquieta de la sangre. Puede denominarse como nervio y sangre lo que se introduce en el mundo y lo que exige ser entendido y conquistado con el propio entendimiento”.

Bases histórico-evolutivas para la formación de un juicio social, sexta conferencia, GA 185a. noviembre de 1918.

 

“Hoy, en cierto sentido, Oriente, con su decadente sabiduría antigua y primitiva, ha caído en la barbarie. Pues la barbarie no es otra cosa que racionalizar los instintos humanos originales y dirigirlos con la razón y la mera vida intelectual. Pero al hablar de la barbarie en los orientales [...], en especial en los rusos, tenemos que llamar por otro lado, avanzando hacia el oeste, partiendo de Inglaterra y siguiendo hacia América, a esta civilización occidental, que no es civilización sino salvajismo. Es lo opuesto a la barbarie. El bárbaro tiraniza al corazón a través de la cabeza; el salvaje tiraniza la cabeza a través de lo que sale del resto del organismo, de la vida instintiva.”

¿Cómo actuar para promover el impulso de la tripartición del organismo social? , segunda conferencia, 1921, GA 338

 

Cómo Oriente percibe a Occidente

“¿Por qué la concepción del ser humano desarrollada en Occidente es un fantasma? - Después de considerar todos los antecedentes históricos, resulta que los instintos que han llevado a la concepción del ser humano en el mundo occidental (que han llevado, por ejemplo, al llamado programa mundial de Wilson, al que tanto se está rindiendo culto) se basan en el fantasma del antiguo Imperio Romano. El fantasma del romanismo es todo lo que se ha ido desarrollando históricamente pero que en realidad tiene un carácter totalmente obsoleto, es decir, luciférico-ahrimánico, y antagónico en nuestros tiempos. Es un fantasma de épocas anteriores. Ciertamente, hay muchas cosas en las culturas occidentales que no tienen nada que ver con el romanismo.

Y en las culturas de habla inglesa se encontrarán muchas cosas que no están relacionadas con el romanismo. También en los actuales países romanos se encuentran muchas cosas que tampoco están relacionadas con el romanismo. Pero eso no es lo que importa; lo que importa es la imagen del ser humano y el intento de encajarla en la estructura social. Hoy en día, en estas regiones, esta concepción del ser humano está instintivamente determinada e influenciada por lo que se formó en la cultura romana.

Esto es un producto de la forma de pensar latina de la cuarta época cultural post-atlante. No es algo vivo, es algo que persigue como el fantasma de un muerto. Y este fantasma permanece oculto al observador cuando quiere formarse una idea de lo que pretende Occidente con su objetivo de hegemonía mundial.

[…] Esta fuerza, pensada para actuar hacia el Este, no es algo del pasado, sino algo que está actuando aún en el presente: la fuerza que emana del imperio mundial británico. Al igual que en Occidente la imagen del ser humano se está convirtiendo en un fantasma por los impulsos del romanismo, en Oriente la imagen del ser humano se imprime en el alma humana de tal forma que las ambiciones del imperio mundial británico, que continuarán durante mucho tiempo en el futuro, ejerza un efecto de pesadilla.

Las dos cosas juntas hacen que en Occidente lo conscientemente desarrollado en el imperio romano siga actuando de un modo inconsciente en forma fantasmagórica y que, al mismo tiempo, las fuerzas del presente, los impulsos de hegemonía mundial británico-americano, sean una pesadilla para la humanidad de Oriente, con el fin de que Oriente llegue a construir conscientemente una imagen del ser humano correspondiente [para la sexta época cultural post-atlante].”

Rudolf Steiner, La exigencia social fundamental de nuestra época, primera conferencia, 29.11.1918, GA 186

 

Rusia: Aversión contra el capitalismo; apertura hacia la vida espiritual

"Solo hay que pensar en los acuerdos comerciales y cosas similares […] y la reacción tímida del elemento ruso [...] en su rechazo de lo que se manifestó como una invasión económica o como el despliegue del poder económico. Todo esto debería ser instructivo y orientativo para nosotros. Todo esto debería mostrar que sería una maniobra realizada con manos ineptas asumir hoy una relación con Oriente a través del comercio y de otras relaciones económicas. Lo que importa, y lo que debemos lograr, a pesar de las grandes dificultades frente al elemento bolchevique, es ante todo introducir en Rusia el elemento espiritual en la medida en que se origina en la vida espiritual constructiva. Todo lo que procede de una vida espiritual productiva se extiende a los sentimientos, que a su vez repercuten tanto en la vida espiritual misma como en la vida del estado y la vida económica. Todo esto será bien recibido por el elemento ruso”.

¿Cómo actuar para promover el impulso de la tripartición del organismo social?, segunda conferencia, GA 338

 

Igual que el Goetheanismo, la filosofía del Idealismo Alemán y otras corrientes espirituales son afines al pensamiento ruso. Rudolf Steiner menciona entre otros ejemplos, el de la Filosofía de la Revelación de Schelling, con un carácter profundamente crístico, afín a la profunda vivencia del ser crístico en la religión ortodoxa rusa.

"En ningún lado de la vida espiritual reciente surge con tanta fuerza la conciencia de que el cristianismo no es una suma de dogmas, […] sino que lo principal es el acontecimiento de Cristo, el Misterio del Gólgota. En ningún lado este aspecto surge con tanta fuerza como en la Filosofía de la Revelación de Schelling. Es impensable que lo que es exteriormente genuinamente inglés, por ejemplo, la filosofía de Francis Bacon, de Spencer, el darwinismo de colorido inglés, o el reciente nuevo pragmatismo, encuentren el acceso a lo que vive allí en las diversas órdenes ocultas de Occidente como es el caso del idealismo alemán.

Rudolf Steiner, Europa central entre Este y Oeste. Historia cósmica y humana, quinta conferencia, Múnich, 18 de marzo de 1915, GA 174a

 

Occidente y Oriente. Salvajismo y barbarie

“Hoy, en cierto sentido, Oriente, con su sabiduría antigua y primitiva en proceso de decadencia, ha caído en la barbarie. Pues la barbarie no es otra cosa que racionalizar los instintos humanos originales y dirigirlos con la razón y la mera vida intelectual. Pero al hablar de la barbarie en los orientales [...], en especial en los rusos, tenemos que llamar por otro lado, avanzando hacia el oeste, partiendo de Inglaterra y siguiendo hacia América, a esta civilización occidental, que no es civilización sino salvajismo. Es lo opuesto a la barbarie. El bárbaro tiraniza al corazón a través de la cabeza; el salvaje tiraniza la cabeza a través de lo que sale del resto del organismo, de la vida instintiva.”

¿Cómo actuar para promover el impulso de la tripartición del organismo social? , segunda conferencia, 1921, GA 338

 

Más allá de Este y Oeste. La trimembración social como orden social internacional transfronterizo. La acción para la Alta Silesia en 1921

Las relaciones culturales de un país no deben tener fronteras ni físicas nacionales ni fronteras de lengua nacional.

En 1921, con ocasión de un referéndum que se iba a celebrar con respecto a la decisión de si la Alta Silesia debía ser agregada a Polonia o a Alemania, un grupo local de la Unión para trimembración social intentó aportar nuevos argumentos al debate, rehusando el tradicional principio del estado nacional y abogando por territorios sociales “trimembrados” en una vida económica asociativa, una vida jurídico-estatal democrática y una vida espiritual libre y autogestionada.

La cuestión de si un territorio situado entre Este y Oeste debe pertenecer a un lado u otro, se repite 100 años después en el conflicto actual de Ucrania de 2022. Tomar la decisión por un lado u otro significa caer en una trampa. Las decisiones y relaciones se desarrollarán libremente desde los tres ámbitos sociales autónomos.

“En pacífica convivencia, las dos culturas, la alemana y la polaca, podrán evolucionar desplegando sus fuerzas vitales, sin tener que temer ningún tipo de intervención violenta de la una a la otra y sin que el estado político tome partido por éste u otro lado.”

Llamamiento a la población de la Alta Silesia, GA 24.

 

El Goetheanismo, fuerza central de equilibrio y paz

En el ciclo “Polaridad mundial entre occidente y oriente“, Rudolf Steiner menciona a Goethe como representante de un nuevo pensamiento científico imaginativo.

"En Goethe, el representante de la Europa central, encontramos el arte y la ciencia unidas en uno".

Polaridad mundial entre occidente y oriente, tercera conferencia, GA 83.

 

Goethe es el gran representante de la necesaria 

“unión del arte y la ciencia, una unión de la idea occidental de la ciencia y la idea oriental de la religión en la imaginación artística.”

Polaridad mundial entre occidente y oriente, tercera conferencia, GA 83.

 

El Goetheanismo es en gran medida imaginación metódica.

El pensamiento goetheano es un pensamiento real ideal que difícilmente puede desviarse hacia el materialismo o idealismo extremo. Desarrollar el goetheanismo es tarea de la vida cultural-espiritual, sobre todo en Europa Central.

La antroposofía como forma ulterior de la ciencia goetheana y la trimembración social llevan el pensamiento goetheano al campo social, a las teorías de economía y al pensamiento de la vida cultural-espiritual libre.

La ciencia goetheana se mueve entre la entrega a la naturaleza y la voluntad activa del observador. No es ni idealista ni materialista.

El pensamiento científico goetheano es moderno pero no por la ciega fe en la ciencia natural como motor del progreso de la humanidad. Al mismo tiempo conserva la sabiduría tradicional de la evolución humana.

Conecta con el pensamiento científico occidental y la profunda sensación interior religiosa.

Crea un equilibrio entre las dos formas extremas de esta polaridad este-oeste: la ciencia natural abstracta y fría occidental por un lado, y por otro, la profunda religiosidad y fe oriental, que no cuestiona o desarrolla su concepción del mundo y el papel del individuo libre en él inserto.

Es una ciencia sin ánimo de someter la naturaleza a intereses de poder, dominio, utilidad, mercantilización (industria farmacéutica) etc.  Es una ciencia natural respetuosa con la naturaleza; estudia los elementos morales y espirituales en la naturaleza. Esta actitud científica, que ha superado el carácter ahrimánico de la ciencia reduccionista, material, utilitarista occidental, es una actitud que se acerca al pensamiento oriental, todavía más unida a la naturaleza y a la tierra.  El Goetheanismo es una ciencia que puede hablar igualmente a las culturas occidental y oriental. Busca la espiritualidad como experiencia individual en la naturaleza, sin dogmatismos.

 

Ciencia económica goetheana, no capitalista: un pensamiento accesible al Oriente y Occidente

Con su forma de presentar los contenidos del Curso Económico, Rudolf Steiner cumple las condiciones que había postulado para la ciencia moderna (económica) occidental, creando para ella un modelo orientador de pensamiento científico puro e imaginativo. Con los conceptos puros de, por ejemplo, “naturaleza, trabajo, espíritu” o “mercancía, trabajo, capital” investiga la naturaleza esencial de las cosas.

Partiendo de las relaciones circulares y la polaridad de los conceptos, Steiner “construye” una ciencia económica imaginativa-real – un germen para una ciencia económica futura de carácter universal, que supera el pensamiento económico capitalista occidental, superando al mismo tiempo fronteras entre Este y Oeste con el Goetheanismo como fuerza cultural-espiritual de Europa Central.

En el Curso de Economía, la imagen del capital incluye que este vuelva a ser fructífero sacrificándose en la naturaleza y la tierra, base natural de toda producción económica, punto de partida natural para la generación de capital. La unión con la tierra en forma de especulación de suelo significaría una enfermedad social. Es la imagen de una necesidad para la economía sana, cuya cualidad “real ideal” puede ser inspiradora para nos nuevos modelos occidentales de la propiedad responsable y al mismo tiempo hablar al alma oriental en su concepción de economía más ligada con la agricultura y naturaleza.

El capital pierde la cualidad marcial a la que tiende el pensamiento económico financiero occidental, e incluso se convierte en fuerza espiritual decisiva para la salud social. En el marco práctico institucional, la función espiritual del capital consiste en el ideal de que la vida cultural-espiritual sea beneficiaria y gestora del mismo.

Un pensamiento accesible para el pensamiento económico ruso estará principalmente orientado a la agricultura y confiado en lo dado por la naturaleza. Un pensamiento que, frente al pensamiento capitalista occidental, solo puede responder con reserva, escepticismo, perplejidad y odio.

Con la ciencia económica espiritual, Rudolf Steiner supera, por un lado, la tendencia occidental capitalista de poder, sometimiento y dominio sobre la naturaleza, y por otro lado, ofrece una medicina contra la antipatía de Oriente contra la ideología capitalista, con un pensamiento imaginativo real-ideal que quita al concepto de capital su carácter materialista y enseña cómo entender su función espiritual en el marco económico social.

"El desarrollo del sistema industrial requiere conexiones asociativas formadas a partir de la vida económica, en las que las personas sepan que sus necesidades estarán satisfechas en la medida en que las condiciones naturales lo hagan posible. Encontrar la vida asociativa adecuada es la tarea de Occidente. Si cumple con ella, Oriente dirá: nuestra vida se diluía en fraternidad – una fraternidad que ha venido a menos con el paso del tiempo; el progreso de la humanidad nos la ha arrebatado. Occidente dejará que prospere de nuevo la vida económica asociativa porque sabe restituir la confianza en la verdadera humanidad".

Polaridad mundial entre occidente y oriente, tercera conferencia, 1 de junio de 1922, GA 83.

La ciencia económica, tal como Rudolf Steiner la desarrolla en el Curso de Economía Política, es una genuina puesta en práctica del Goetheanismo en el campo de la economía.